No todo lo que brilla es oro. Cuando nos encontramos en la búsqueda de alguna propiedad, el mercado inmobiliario nos presenta atractivas opciones que no sólo cubren nuestras necesidades sino que nos prometen todo un conjunto de beneficios para convencernos de adquirir determinado producto: ubicación, calidad, sustentabilidad, mejores áreas verdes y sobre todo, plusvalía. Pero, ¿qué es la plusvalía? Sin tener conocimiento sobre arquitectura, podemos calificar muchas de los atractivos que nos ofrecen de acuerdo a nuestra experiencia y comparando los diversos productos en el mercado, pero hoy en día todos ofrecen este concepto como parte de su filosofía básica también. ¿Te gustaría conocerlo más a fondo?
La plusvalía es un concepto que nació en la economía del trabajo derivado de las teorías de Adam Smith, David Ricardo y Karl Marx; es un término que se aplica a la cantidad de producción que genera un trabajador cuando su salario ha sido cubierto y aún tiene tiempo de su jornada para producir mayor volumen. En otras palabras, la plusvalía es básicamente la utilidad que recibe un patrón por la actividad laboral de sus empleados y significa mayores ganancias económicas.
¿Cómo se traduce entonces este concepto al sector inmobiliario? La plusvalía se refiere al aumento en el valor que tiene cualquier propiedad derivado de factores externos que no están directamente relacionados al costo directo como la construcción o cualquier mejora que hacemos a una propiedad sino a situaciones que dependen del contexto en el que nos encontramos. La ubicación, por ejemplo, puede brindar plusvalía a nuestra propiedad si se encuentra bien conectada e integrada a la ciudad en la que vivimos, si se generan proyectos detonadores en la zona como centros comerciales y equipamientos, si se mejora el transporte público o simplemente si se ha logrado la consolidación de la zona reduciendo las ofertas de venta pero manteniendo el interés de la población por adquirir una propiedad… como siempre, los principios de oferta y demanda.
El valor de una construcción nunca va a incrementarse, al contrario; con el paso de los años se vuelven viejas y obsoletas y requieren cambiar instalaciones, modernizar espacios, mantenimiento de techos y humedades que poco a poco reducen su valor. El terreno es quien gana la plusvalía esperada, pero al igual que la energía, los valores de la tierra en una ciudad no se crean ni se destruyen sólo se transforman, y al igual como una propiedad puede ganar plusvalía, habrá otras tantas que la pierdan y se deprecien de forma significativa. Para que un fraccionamiento aumente el valor de sus propiedades, necesariamente otro tiene que ceder ese porcentaje y en la mayor parte de casos, lo hacen de forma dramática.
La mayor parte de desarrollos adquieren plusvalía al paso de mucho tiempo, generalmente cuando las propiedades pasan de una generación a otra y además del valor económico, tienen un valor sentimental y de apego muy fuerte. Si buscas una propiedad que aumente de valor rápidamente para invertir tu capital, es importante conocer la situación del mercado inmobiliario de primera mano y te dejamos 5 simples consejos:
1 Los desarrollos con mayor plusvalía son los que tienen los reglamentos y códigos más estrictos. Las construcción de tus vecinos pueden aumentar o reducir el valor de tu propiedad y un estilo uniforme siempre será bien valorado. Si el fraccionamiento ya ha sido construido por el desarrollador, verifica las opciones de ampliación, remodelación y mantenimiento; una mala ampliación en el desarrollo, reduce el valor de todas las propiedades.
2 Aún bajo el sol, todos preferimos caminar a un buen restaurante que aumentar nuestra huella de carbono usando el auto. Entre más cerca estén los espacios comerciales y los equipamientos, mayor valor tendrá tu propiedad. ¡¡¡Ubicación, ubicación, ubicación!!!
3 Los condominios siempre tendrán amenidades interesantes pero representan una renta mensual que debes considerar pues impacta forzosamente en el valor de tu propiedad. Al comprar, pregunta por los costos de mantenimiento y revisa los reglamentos internos; siempre es bueno tener planes de contingencia y programas para mantener actualizados los desarrollos. En algunos casos que se han vendido todas las propiedades y el desarrollador deja de encargarse de las áreas comunes, éstas pierden su encanto.
4 Existe mucha competencia y todos ofrecen cosas maravillosas que no siempre se pueden cumplir. Prefiere los desarrollos consolidados pues ahí verás si realmente te darán lo que te ofrecieron y además encontrarás una plusvalía más rápida que en los nuevos condominios. Si las calles de acceso, centros comerciales y áreas verdes aún no están construidas al momento de comprar, es posible que nunca lo estén.
5 Conoce a tus vecinos y sus intereses. Si todas las personas que compran una propiedad en un condominio esperan revender para obtener ganancias, la oferta de las propiedades aumentará y eso bajará considerablemente el costo de reventa. Recuerda que a mayor oferta el costo debe bajar.
Dedicar un poco de tiempo a estudiar en dónde invertirás tu capital, seguramente te generará muchas ganancias. Investiga, lee, visita todas las ofertas que te interesen y busca apoyo de profesionistas calificados, serios y neutrales que te puedan dar una visión clara del mercado; finalmente, es sólo tu decisión. Si tienes alguna duda o deseas que te apoyemos en la selección de los mejores agentes inmobiliarios en la zona, no dudes en contactarnos.
JPV
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